Siempre que pensamos en el desierto, solemos hacernos a la idea de que la única forma de vivir en él es gracias a las famosas Haimas (tiendas de campaña) pero la arquitectura prefabricada ha venido para revolucionar todo y hacer posible vivir cómodamente incluso en uno de los ecosistemas más hostiles para el hombre.
La firma de diseño italiana Barberio Colella Architetti y el arquitecto Angelo Figliola unieron fuerzas en el proyecto Urban Dunes, que tiene como objetivo reducir el efecto isla de calor para un clima extremo como Abu Dhabi.
Ambos expertos han elaborado una propuesta de diseño que partió de la profunda conciencia del contexto climático de la arquitectura tradicional de Abu Dhabi y Emiratos: dominar la furia de la arena a la vez que recuperan el viejo estilo tan característico de las construcciones de los pueblos nómadas con elegantes espacios abovedados y cuencas de agua fría.
¿Nos acompañas a la tierra de los rascacielos imposibles y los jeques árabes?
La idea arquitectónica principal detrás del proyecto es idealmente levantar una capa gruesa de arena para crear un «oasis» urbano, que mezcla sistemas activos pasivos y de baja tecnología para maximizar el confort térmico exterior calculado con el índice UTCI.
La bóveda está compuesta por varios bloques estereotómicos hechos de arenisca impresa en 3D, utilizando la arena local como material principal. Esa misma arena (recurso infinito en el desierto), se solidifica utilizando la tecnología de chorro de aglutinante y así son capaces de fabricar grandes bloques constrcutvivos con un alto nivel de precisión.
Urban Dunes: un proyecto arquitectónico que incluye arena y tecnología 3D
El uso de una bóveda impresa en 3D con un espesor de 55 cm, permite evitar el sobrecalentamiento del espacio urbano gracias a la alta masa térmica de la cáscara, actuando como principal estrategia para impedir el paso del calor (muy parecido a lo que hacen las passiv houses).
La arena se mezcla con pigmentos fríos que reflejan el calor para aumentar la reflectancia de la superficie y reducir la acumulación de calor reduciendo así el consumo de energía a través de menores requisitos de enfriamiento. El espacio debajo de la bóveda representa un espacio microclimático urbano protegido del sol mediante un dispositivo de protección solar vernáculo, el mashrabiya, que mejora también la ventilación natural del espacio.
El viento se encuentra con la superficie perforada del mashrabiya y aumenta su velocidad debido al efecto Venturi. Este flujo de aire entrante se encuentra y toca los depósitos de agua fría difundiendo una sensación de frescura dentro del espacio público.
Además, el espacio debajo del caparazón también se ventila de forma natural con el uso de un sistema de baja tecnología, ya que las tuberías de tierra y cuatro mini atrapavientos se colocan siguiendo el análisis CFD.
Las especies vegetales autóctonas también están presentes en Urban Dunes
La vegetación, como las clásicas palmeras, y la presencia de dos fuentes en cascada funciona en combinación con la ventilación natural del espacio, dando una sensación refrescante, fluye reforzada psicológicamente por la vista del agua.
El proyecto también cuenta con dos sistemas activos para maximizar los esfuerzos de enfriamiento. Por un lado, se utiliza un sistema de nebulización de alta presión para reducir significativamente la temperatura del aire circundante, hasta – 20 ° C, forzando el agua a través de una bomba de alta presión que produce una neblina microfina.
Por otro lado, la carcasa se enfría a través de una red de tubos a través de los cuales fluye un líquido refrigerante. La temperatura constante de la tierra se puede utilizar para enfriar pasivamente el fluido.
Sí, la conquista del desierto también es posible gracias a la arquitectura y la tecnología 3D.